Detectando Gilipollas

Dice el refrán que “se descubre antes a un mentiroso que a un cojo”, pues bien, hay que hacerle un añadido “Se descubre antes a un mentiroso o a un gilipollas que a un cojo”. Si usted tiene la mala fortuna de ser cojo y quiere pasar desapercibido está de enhorabuena, porque será el tercero en ser detectado en un grupo con un mentiroso y un gilipollas.

Twitter es un patio de vecinos a nivel mundial, una herramienta que no uso pero reconozco su utilidad. Uno dice lo que quiere, cuando quiere y como quiere y al segundo siguiente lo pueden leer en cualquier parte del mundo.



Artista y bromista



Nacho Vigalondo es director, actor, guionista, bailarín y cantante…así es el arte, como si un mindundi se presenta en una oficina y dice soy economista, abogado, ingeniero de telecomunicaciones, controlador aéreo y periodista, como para no contratarle.

Este artista multidisciplinar ha dicho en Twitter “¡El holocausto fue un montaje!” además ha salpicado está afirmación con ingeniosos títulos de películas cambiados para la ocasión como: "El niño del pijama de rayas se va de marcha" o “Encuentro en la tercera fosa”…un talento salido de su deformación profesional

La lluvia de críticas no se ha hecho esperar. “Ha incendiado Twitter” como se dice ahora.

Nadie en su sano juicio se cree estas afirmaciones, ni el propio Vigalondo, no me cabe duda. Admite haberse animado a hacer estas declaraciones bebiendo vino, todo un detalle de sinceridad etílica.

El caso es que al final, cuando todo se ha desatado comenta: “Mis bromas son un detecta-gilipollas para expulsar a los followers (seguidores) sin sentido del humor".

Sr. Vigalondo, la ironía es un arte, pero uno de verdad. No como el cine o la canción actual. No basta con escribir lo contrario de lo que piensas o reírte de algo que normalmente no tiene la menor gracia. Si quiere ejemplos pásese por la blogosfera donde están las mejores columnas de opinión de la actualidad, desbancando al periodismo tradicional o estudie las viñetas de Antonio Mingote (ABC) o El Roto (El País).

Otro iluminado

Otro personaje del día no trata de detectar gilipollas ya que considera que todos los trabajadores de este país lo son, es el comprador de votos profesional Juan Carlos Rodríguez Ibarra.

Este expresidente jubilado, con pensión privilegiada y que se las da de rebelde desde que dejo el PSOE nos muestra su verdadera cara, la de siempre, la del tiranillo rural con aspiraciones.
Para mejorar la actual situación económica propone:

"trabajar una hora más al día sin percibir remuneración por ella, con la condición de que el beneficio de ese trabajo se destine a gastos irrenunciables para la igualdad entre los ciudadanos”

Que progre él. Aparte de trabajar hasta los 67 ahora quiere que trabajemos una horita más por la cara. Y para conciliar la vida familiar ¿Qué propone? ¿Qué durmamos en la oficina con nuestros familiares?

Parafraseando a Lenin “Vida privada, tiempo libre ¿Para qué?”

De postre algo simpático de un cantante de ensortijado pelo y cerebro planchado. No me cae mal David Bisbal. Le veo un muchachote sano y trabajador, con mucha voluntad e ilusión. Su música no me gusta pero eso es lo de menos.

"E inncriible la qui i
montao"

Pues el almeriense tiene una curiosa visión de las revueltas egipcias:

"Nunca se han visto las pirámides de Egipto tan poco transitadas, ojala que pronto se acabe la revuelta”

Le han llovido críticas pero a mi modo de ver, injustificadas. Me han hecho reír y no veo ninguna mala intención. Desde que se hizo famoso nunca ha destacado precisamente por una vasta cultura.

¿Ves Nacho Vigalondo?, si David Bisbal fuese más leído, su frase si que sería pura buena ironía.