Situado en el suroeste de la región de Yukón y con apenas 450 habitantes, Carcross es parada recomendada en el camino si uno se dirige hacia el Sur de Alaska o hacia el Noroeste de Canadá. Si tienes la suerte de dejarte caer por allí en un día soleado el paisaje y la sencillez del pueblo te cautivará.
Poco antes de llegar al pueblo se encuentra su mayor atracción: Carcross desert “el desierto más pequeño del mundo” según reza un cartel en la entrada.
El pueblo en sí parece estar entre dos lagos pero en realidad es el mismo que se estrecha hasta el tamaño de un río a su paso por dicho pueblo.
Uno de esos comercios vende helados, golosinas varias y palomitas. Como el olor que salía despertaba el apetito me compre una bolsa y fui a sentarme a unas mesas en frente del comercio y vi unos cuantos agujeros en el suelo. A los 2 minutos de estar allí empezaron a asomarse unas simpáticas ardillas. Por supuesto les tire unas cuantas palomitas (es lo que esperaban) y poco a poco se fueron acercando.
Cuando cogieron confianza puse unas cuantas encima de la mesa y…subieron para comérselas delante de mi, momento que aproveche para hacerles unas fotos.
Un corto paseo te lleva a un puente por donde antaño discurría el tren. Ahora se ha quedado para hacer fotos del mismo y del precioso lago.
Tras el descanso volví a coger el coche para dirigirme a Skagway…pero eso será en otra entrada.
Parece un sitio adecuado para la tranquilidad. Me lo apunto por si algún día voy. Que listas y monas las ardillas. Esos lugares donde uno puede sentirse realmente tranquilo estando solo son los que merecen la pena.
ResponderEliminarSi. Está en medio de nada. Es muy adecuado para descansar.
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