La democracia es la inocentada

Los españoles somos ciudadanos con un muñequito de papel en la espalda desde que tuvimos uso de razón democrático y no parece que nos lo vayamos a quitar a corto plazo; Bien porqué nos divierte ver a otros con el monigote (aunque el nuestro sea más grande) o bien porque el brazo no nos llega a la espalda de tanto encogerlo por no molestar o herir sensibilidades.

Muerto el dictador, nos dejo un bromazo del que todavía nos estamos riendo. Consiste en que vienen unos tíos trajeados que aspiran a ser presidentes y te acompañan a la urna y te dicen “mete, mete el voto no seas tímido, verás que gustirrinín” y cuando lo metes te pega un calambrazo que te deja los pelos como el cepillo de un centurión romano.

Tanto nos ha gustado la guasa que la llevamos repitiendo 35 años celebrándolo como el primer día; En este país encajamos bien las bromas. Nos seguíamos riendo con Felipe González cuando lo que único que faltaba era encontrártelo en el salón de tu casa robándote la vajilla de las ocasiones. Nos reímos ahora con Zapatero cada vez que nos sube la luz (buen momento para invertir en leña), el gas, la gasolina, el tabaco, el irpf y le regala el dinero a bancos, homosexuales extranjeros, sindicatos etc y nos reiremos con Mariano cuando haga todo lo contrario que no dice que ha dicho que hará si lo dice.

El dúo cómico Zapajoy no hace nada nuevo que no hiciesen al principio de sus shows Faemino y Cansado. Para los que no lo recuerden o lo desconozcan, ambos entraban bailando torpemente y con grandes aspavientos durante unos momentos. Entonces Cansado decía “gracias, gracias por esos aplausos porque somos artistas que todo esto lo hacen Por la Pasta, gracias”, seguían bailando y Faemino decía “joe macho, dicen que esto es facil… ¡una mierda como un piano fácil!”

Valoraría mucho la honradez de Rajoy si empezase un mitin bailando como un gorila con calambres y diciendo “Gracias, gracias votantes por esos aplausos porque soy un político que hace todo esto ¡¡por la pasta!!, ¡gracias!” y a su lado con semblante serio de niño sabiondo y voz profunda, Gallardón “Dicen que esto es fácil macho…una mieeeerda así de gorda”.

El día de los santos inocentes ya no es lo que era. Hace una década era francamente divertido ojear los diarios para descubrir la broma, en su mayoría ingeniosas y muchas, creíbles.

No sé si la crisis nos ha curado de espanto pero las que he podido ver hoy no eran ni divertidas ni creíbles. Pero curiosamente, leyendo los periódicos he tenido la impresión que cualquier noticia podía ser una inocentada dadas las cotas de surrealismo que ha alcanzado la actualidad política, cultural, deportiva…